Doctrinas de la Gracia

El orden de la salvacion:

Del pacto de la redencion establecido entre las personas de la trinidad y encaminado a la salvación de los hombres perdidos, fluye el pacto de gracia que muestra la actitud de Dios hacia el pecador mediante la obra de Cristo. Aunque, como en todo pacto, hay 2 partes, sin embargo en éste toda la iniciativa surge de Dios: Dios establece el decreto; Dios provee el medio de rescate (la cruz); Dios suministra el Espíritu vivificante, la fe justificante, el arrepentimiento transformante y la perseverancia del creyente. Toda la base o fundacion del pacto está en Dios, pues de El recibe el pacto toda su firmeza y seguridad, mientras que el hombre, incapaz de aportar por sí mismo ninguna contribución, se limita a extender la mano de la fe y a recibir el don de Dios.El mediador de este pacto, como se nos describe en hebreos con todo lujo y detalles, es Jesucristo: de parte de Dios, El lleva al hombre la salvación mediante el sacrificio de Sí mismo; de parte del hombre, ofrece a Dios - Hecho El mismo "pecado"- lo que el hombre pecador debería hacer por Dios si pudiese : expiar sus pecados en la Cruz.Así, el pacto que es absoluto e incondicional en la voluntad de Dios de salvar a los hombres perdidos, queda de algún modo condicionado:

a.-por la obra de Cristo, que ha de proveer el pago del rescate.

b.-por la fe del hombre pecador, que como la mano con que se apropia de los beneficios del pacto. Sin embargo, ninguno de estos dos elementos arrebata al Padre la iniciativa de la salvación.

No el a.- ,porque en realidad, no es Jesucristo el que se lanza por sí mismo a reconciliar a los hombres con Dios, sino que "Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo" (2ª corintio 5:19).

No el b.-porque la fe misma del pecador arrepentido es un "Don de Dios".